¿Qué diferencia la violencia de género de las demás? Esta violencia es exclusiva de parejas heterosexuales y se produce en el seno de una relación afectiva en la que el hombre es violento hacia la mujer, por el simple hecho de serlo. También es la que sufren los hijos de dicha pareja por parte del progenitor.
Pero además, debe cumplir ciertos criterios:
-Se trata de una relación en la que existe desigualdad, es decir, el hombre asume una posición de control y dominación sobre su pareja. LA RELACIÓN ES VERTICAL .
-Su pareja, debido a las circunstancias y a la violencia sufrida, se mantendrá en una posición subordinada para intentar aminorar las agresiones que sufren tanto ella, como sus hijos.
-El hombre agrede para hacer daño y mantener su posición, y lo hace a través de múltiples abusos y agresiones. La violencia ejercida puede ser de tipo físico (empujones, tirones de pelos, golpes… incluso estando embarazada), psicológico (humillaciones verbales, insultos, menosprecio, infidelidades), sexual (relaciones sexuales forzadas, peticiones sexuales humillantes), social (aislamiento respecto a la familia o amistades, restricciones en el acceso a información), económico (control del dinero, control de gastos), entre otros.
-Un tipo de violencia importante ejercida dentro de la VG es la VICARIA: Ocurre cuando los hijos de la mujer maltratada son instrumentalizados para causar daño a sus madres.
-La violencia de género puede darse en parejas no convivientes, es decir, entre miembros que no conviven juntos.
-La mujer desarrolla una ILUSIÓN DE CONTROL, es decir, piensa que mostrando un mejor y más eficiente comportamiento por su parte puede controlar, disminuir, prevenir o aplazar las probabilidades de que su pareja maltratadora la agreda, puesto que además, ésta suele achacarle a ella las causas por las que él se ve “obligado” a “corregirla”.
–Se desarrolla a través de tres fases:
FASE DE TENSIÓN: el hombre va acumulando tensión y va cambiando repentinamente de actitud. La mujer suele intentar minimizar o prevenir la ocurriencia de la siguiente fase, cuando en realidad, no depende en absoluto de ella. Se refuerza la ilusión de control por parte de la víctima.
FASE DE EXPLOSIÓN: Se producen la violencia y las agresiones, tanto hacia la mujer, como hacia los hijos.
FASE DE LUNA DE MIEL O ARREPENTIMIENTO: El agresor dice arrepentirse, pide perdón, promete cambiar para seguir controlando que su víctima no deje la relación. Se trata de una manipulación en la que el hombre pretende conseguir que la relación se mantenga, al igual que su jerarquía.
Las fases, a lo largo de la relación, se irán repetiendo, hasta que prácticamente solo quede vigente la fase de explosión y agresión.
¿Por qué las mujeres permanecen en relaciones violentas? Por varios motivos. Algunos suelen ser:
–Indefensión aprendida: Estado psicológico que interioriza la víctima que dificulta que ésta solucione problemas, puesto que la mujer ha aprendido que lo que sucede es incontrolable pese a sus esfuerzos. Nada de lo que haga será suficiente para que su situación mejore. Esto erosiona las probabilidades de cambio, sobre todo si hay antecedentes de ello en la historia de infancia.
–Necesidad de ayudar al otro: Aprendizaje inculcado, sobre todo al rol femenino, de que las necesidades de las mujeres no son tan importantes como las de los demás, y que por tanto, lo que una niña, joven o mujer adulta pueda querer o desear, debe aplazarse o anularse en beneficio del otro.
–Vinculación paradójica con el agresor: Estado psicológico en el que, junto con los anteriores factores, la mujer está tan confusa, que opta por permanecer en un lugar en el que siente miedo, pero que ya le resulta conocido y en el que intentará adaptarse.
Existen muchos tipos de violencia dentro de las parejas o de las familias, todas igual de importantes, pero la de género es la ejercida exclusivamente de un hombre hacia una mujer, y en un contexto de intimidad. Las relaciones violentas entre miembros de la familia son violencia intrafamiliar. Las ocurridas entre parejas que se agreden mútuamente, son casos de violencia entre la pareja, al igual que las ejercidas de una mujer hacia un hombre o en parejas homosexuales.